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Si quieres posicionar tu página web o tienda online en las primeras posiciones de los motores de búsqueda, uno de los factores más importantes a los que debes atender es a la optimización de tu contenido. El algoritmo de Google (y el del resto de los motores de búsqueda) cada vez es más inteligente y complejo. En la actualidad es capaz de entrar y leer todo tu sitio web en cuestión de milésimas de segundo y comprender de qué y cómo se habla de tu tienda online. En el post de hoy enseñaremos qué hay que tener en cuenta a la hora de crear contenido SEO para que éste se muestre lo más arriba posible en los resultados de los buscadores.
Planteamiento y consideración inicial respecto al contenido SEO
En el mundo del marketing online existe una corriente con muchos seguidores que afirma que lo mejor para optimizar un contenido SEO de cara a los motores de búsqueda es, paradójicamente no tenerlo en cuenta. Y es que, cada vez más, la tecnología es capaz de detectar factores que antes se dejaban de lado. Un ejemplo claro de ello es la experiencia del usuario.
El usuario tiene que ser el comienzo y el final de nuestra estrategia. Google te ascenderá a los primeros puestos si detecta que los usuarios que entran a tu web pasan un buen tiempo en ella, navegan, leen, interaccionan… En cambio, por muy optimizado para SEO que puedas tener tu contenido, si el usuario acaba abandonando tus páginas, te penalizará. Teniendo esta premisa en cuenta, abordaremos una serie de factores que pueden ayudarte para alcanzar las primeras posiciones.
Factores a tener en cuenta de cara a una optimización SEO del contenido
- La longitud del texto
Se ha establecido una regla no escrita en el sector que afirma que, como mínimo, tus páginas deben tener 300 palabras. A partir de ahí, cuanto más azúcar más dulce. Pero siempre teniendo en cuenta al usuario. No sirve de nada subir textos vacíos de miles de palabras porque el usuario al final se marchará. Tampoco es beneficioso tener páginas cortas de 100 palabras, porque el usuario no invertirá demasiado tiempo en él. Una buena práctica es combinar los formatos, incluir citas, destacados, algún video, jugar con las imágenes….
- La relevancia del texto
¿Es tu texto realmente relevante para los usuarios que buscan las palabras claves que intentas posicionar? Nunca vas a conseguir posicionarte por una palabra que nada tiene que ver con el contenido de tu empresa. Siguiendo la premisa de centrarte en el usuario, enfoca y trata los temas realmente importantes de tu temática y sé el mejor en lo tuyo.
- Los primeros párrafos
Presta especial atención al contenido de los párrafos superiores. Al igual que en los textos periodísticos, el algoritmo aplica una estructura piramidal a los contenidos, dando más importancia a los párrafos que están más arriba y considerando “complementarios” a los sucesivos. Colocar tu keyword (de forma natural) en los primeros párrafos es una buena práctica que podrías llevar a cabo.
- KeyWord Stuffing y densidad de palabras clave
KeyWord stuffing se conoce a la técnica de sobreoptimizar y repetir forzosamente la keyword que se quiere posicionar de forma no natural. Como decíamos, los algoritmos han evolucionado y son capaces de detectar esta práctica. Además, utilizar repetidas veces un mismo término no es agradable desde el punto de vista del lector. Y en cuanto a la densidad de palabras clave, no existe ningún porcentaje perfecto. Desde google se limitan a recordar que hay que escribir de la forma más natural posible. Una razón más para centrarnos en el lector y no en el robot.
- Actualidad y facilidad para compartir
Los motores de búsqueda intentan ofrecer los mejores resultados a sus usuarios, y uno de los factores que tienen en cuenta es precisamente la actualidad de los textos que estén incrustados en la página web. Puedes tener un texto súper trabajado y optimizado, pero si es de hace 10 años atrás, Google ni ningún otro motor de búsqueda lo va a mostrar entre sus resultados. Para evitar esto, recomendamos que actualices tus artículos e intentes aportar al usuario el máximo de información posible. También deberás ponerlo fácil para los usuarios que quieran compartir tu contenido. Colocar enlaces sociales alrededor del texto es una buena forma de hacerlo.
El uso de etiquetas H’s, alts y metaetiquetas
Las etiquetas Header
Las etiquetas H’s son las etiquetas que indican la jerarquía de un título dentro del contenido de una página web. Por ejemplo, la etiqueta <h1> (header 1) indica que el texto que viene a continuación es el más importante dentro de todo el esquema. Por debajo de él vendrían los títulos con la etiqueta <h2>, después los <h3> y así sucesivamente. Si ponemos un ejemplo con lo que llevamos de texto en esta entrada:
- el <h1> sería “Factores a tener cuenta a la hora de crear y optimizar contenido SEO” que es el título principal de esta página.
- Como <h2> tenemos “Planteamiento y consideración inicial respecto al contenido SEO” y “El uso de etiquetas H’s, Alts y metaetiquetas”
- Como <h3> encontraríamos “Las etiquetas Header”, o los dos puntos a continuación de esta lista.
Esta es una forma fácil y clara de esquematizar el contenido y decirle al robot de Google cómo tiene que interpretar nuestra página.
Las etiquetas alt
Las etiquetas <alt> sirven para indicar el texto que se debe mostrar en el lugar de una imagen en concreto en caso de que esta no pueda ser cargada. Este es un factor importante porque se le puede decir a Google lo que representa una imagen. Por ejemplo, si Google reconoce (a través de la etiqueta alt) que una imagen es un paraguas, entenderá que en el texto se habla, entre otras cosas, de paraguas.
Las metaetiquetas
Por último, las metaetiquetas (metatitle y metadescription) son un pequeño título y descripción de la URL en la que se está. Esto es importante porque también es lo que Google muestra en sus resultados de búsqueda. Deberá de llamar la atención e intentar resumir en pocas palabras qué se encontrará el usuario si visita tu página. Este tipo de parámetros también son conocidos como etiquetas SEO.
Precauciones que deberás tomar
Además de todo lo anterior, deberás asegurarte de que tu contenido sea 100% original. Ni se te ocurra copiar y pegar texto de otras páginas ni repetirlo dentro de tu propio dominio. También deberás vigilar velocidad de carga de tu sitio web y procurar que el contenido se muestre lo más rápido posible. En este sentido, es muy importante que comprimas las imágenes para que puedan cargarse lo más rápido posible.
Como conclusión, volvería a recalcar que los contenidos deberán estar enfocados en el usuario o potencial cliente de tu tienda online y, partiendo de esta máxima, aplicarle los tips que hemos ido explicando a lo largo de todo el post. Procura que el contenido SEO de tu ecommerce sea relevante, útil para el usuario… y, por supuesto original para diferenciarte frente a tu competencia. Sólo de esta forma podrás escalar posiciones en los resultados de los motores de búsqueda.